Hermanas misioneras de marilam
el instituto misionero maría de las américas, marilam
Tiene sus raíces, en la Fraternidad Misionera Juvenil, ORBIS, fundada por Monseñor Marcelo Gerín en la Diócesis de Choluteca, Honduras, C.A. Las dos primeras Hermanas: María Elena Díaz y Altagracia Cañas , después de renovar su promesa misioneras en ORBIS, sintieron el llamado de una entrega incondicional al Señor dentro de la vida religiosa misionera.
Por lo que inician su proceso de formación en una Congregación en México, para luego continuar en Honduras, cuna de la Congregación.
Así el 08 de septiembre de 1985, se funda en la Arquidiócesis de Tegucigalpa esta obra, que inicia pobre y sencilla; pero con el gran deseo de servir a la humanidad.
carisma y Espiritualidad.
Nuestro carisma misionero brota de la contemplación del amor misericordioso del Padre que nos escoge, del Espíritu Santo que nos unge y del Hijo que nos envía para la salvación del mundo; por eso somos presencia del amor misericordioso, entre los más pobres, los que más sufren y entre aquellos que todavía no conocen a Jesucristo.
Nuestra Espiritualidad es Cristo céntrica, mariana y misionera. Se enraíza en la constitución bautismal que hace de nosotras hijas de Dios y de Maria, enviadas y evangelizadoras según el modelo de Cristo Jesús, pobre, casto, obediente y misericordioso, perfecto en la caridad y en servicio misionero sin fronteras.
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La misión sin fronteras es también tu vocación.
La misión sin fronteras es también tu vocación.
La comunidad busca los sectores urgidos de evangelización, especialmente aquellos lugares donde no hay sacerdote o donde está solo en su trabajo pastoral. Las Hermanas se dedican a evangelizar en medio de muchas dificultades.
Nuestra misión consiste en llevar la Buena Nueva Jesús, a todos, por medio de la catequesis Misionera y siendo presencia del amor misericordioso de Dios.
Fieles y disponibles al Espíritu Santo nuestra vida se entrega para la fecundidad de la misión universal de la Iglesia, inspiradas en el lema de San Pablo, que hizo suyo nuestro fundador “ay de mi si no evangelizo”. Por eso nuestro trabajo va desde el primer anuncio, hasta que cada bautizado sea misionero.
Nuestro Apostolado
Está marcado en la actualidad, animación y cooperación misionera, para que el pueblo de Dios tome conciencia de su compromiso misionero y de la necesidad de lanzarse a la misión.
Las Hermanas Misioneras de MARILAM, para realizar nuestro apostolado efectivamente, consideramos como elementos esenciales: la dependencia absoluta de Dios, a través de la oración personal, comunitaria y la entrega incondicional a Cristo en el servicio de los hermanos.
atentas al espíritu cercanas a nuestro pueblo, construimos caminos de comunión y de sinOdalidaD.
Elementos del Escudo de MARILAM
Lema: Llamadas para estar con Él y Enviadas para a Anunciar el Evangelio.
Estrella de MARILAM
La Cruz Misionera
Mapa de América en el mundo.
La presencia de María bajo la advocación de Nuestra Señora de Guadalupe, Estrella de la Evangelización en nuestro Continente, es modelo e inspiración para la Misionera de Marilam. Portarla en la replica de una estrella es reconocerla como luz y esperanza de nuestros pueblos .
Fundadas en el Continente de la esperanza, con apertura al mundo entero necesitado de Dios, llevamos la Buena Nueva a todos, puesto que somos una Congregación misionera Ad intra-extra.
En fidelidad a la propuesta de Jesús “El que no toma su cruz y me sigue, no puede ser discípulo mío” (Mc, 8,34). La cruz está pintada por los colores misioneros, para significar que en nuestra vida los sufrimientos y alegrías, son vividos y ofecidos por el mundo entero.
La Biblia
Fuego
La palabra de Dios, leída, meditada y orada, es la que nos impulsa a ir hasta los confines del mundo, creyendo en las promesas que El Señor hace a través de ella, queremos ser portadoras de Buenas Noticias, anunciando el Reino de Dios.
Ustedes son la luz del mundo (Mt.5,14-16). Indica la pasión por la misión, el fuego del Espíritu que es abrasador y que nos impulsa a contagiar a otro, irradiando la luz de Cristo.
Espiga
Símbolo de la Eucaristía, que es fuente y cumbre de la Iglesia. No podemos ser misioneras si nuestra vida no se sustenta en ella; la que nos permite, ser pan partido para la humanidad necesitada de la presencia real de Cristo. Con nuestro fundador afirmamos “Qué sería de nosotras sin la Eucaristía”.
Significa la FE que tuvo María para acoger el llamado del Padre, a ser Madre del Salvador. Es la fe necesaria para cada Misionera de MARILAM, que anuncia lo que cree.
fe
fe
Misión
Primer
Saliente:
Amor
Tercer
Saliente:
Simboliza el AMOR La misionera de MARILAM, capacidad para amar con un corazón sin frontera, sale al encuentro de todos, especialmente de los pobres y excluidos. Asumiendo el Espíritu de nuestro Fundador. “El que no ama no puede ser misonero”.
Representa la CONFIANZA absoluta en Dios, que ha tenido la Virgen María, que aunque no entiende los acontecimiento, los guarda en su corazón y realiza la voluntad del Padre.
Segundo
Saliente:
confianza
Cuarto
Saliente:
Significa la MISIÓN. La vida de la Misionera de MARIALM, está impregnada de la misión de Jesucristo, de tal manera que, todo lo que vive y realiza es en función del anuncio del Evangelio. Que le lleva a ser presencia en personas concretas, en ambientes y lugares emergentes.
En el centro de la Estrella: está la Virgen María, que representa la centralidad en Dios. Él es el único que anima y dinamiza el ser y quehacer de la Misionera de MARILAM.
En fidelidad al don del Espíritu Santo , por nuestro Carisma Misionero recibido, queremos seguir ofreciendo al pueblo de Dios y a la Iglesia particular en donde servimos con todos nuestros dones, talentos y capacidades que puestos al servicio , sean medio para que los hombres y las mujeres encontrándose con Jesucristo , lleguen a ser discípulos misioneros , apóstoles incansables de la misión.
NUESTROS PATRONOS
Imitamos a San Francisco Javier, patrono universal de las misiones, lo arriesgamos todo para que Jesús sea conocido, amado y servido por todos y buscamos siempre los lugares más necesitados de evangelización.
El Instituto Misionero María de las Américas MARILAM, Esta bajo la protección de Nuestra Señora de Guadalupe, Reina y Madre de las Américas, modelo de servicio eclesial y Estrella de la Evangelización en el continente americano Y de San José, su fiel esposo.
Seguimos las huellas de Santa Teresita del Niño Jesús, doctora de la Iglesia y patrona universal de las misiones; de quién tomamos gran parte en nuestra espiritualidad, ya que ella fue llamada para realizar su vocación de amor en la Iglesia, imitamos sus virtudes de sencillez, confianza absoluta en el amor misericordioso de Dios y el amor incondicional a la Iglesia.
Para las Hermanas Misioneras de MARILAM. La Pastoral Vocacional consiste en ayudar, acompañar y guiar a las jóvenes para que estas busquen el sentido que quieren darle a su vida, ayudándolas a que tengan un verdadero encuentro con Jesucristo y a que sean capaces de responder generosamente a la llamada del Señor.
Se le ayuda a las jóvenes a descubrir y responder al llamado que Dios les hace; desde su historia y desde la realidad que viven.
Se les brinda proceso de acompañamiento psicológico, humano y espiritual a las jóvenes que tienen inquietudes vocacionales, facilitándoles espacios de discernimiento.
vocacional
Pastoral
Que es la vocación
La vocación un signo de amor.
Quieres saber cual es tu vocación
Gracias Señor por la vocación
La vocación un llamado
Quiero seguirte Señor
Dios continua llamando
Discernir la vocación.
Etapas de formación.
Es la etapa en la que la candidata inicia su proceso de formación a la vida religiosa en nuestro Instituto. Además es donde la formanda aprende a conocerse, conoce la Congregación y adquiere herramientas que le ayudan a vivir la experiencia de encuentro con Jesucristo.
Tiene duración de un año a dos años.
Aspirantado
Es un tiempo de reflexión y profundización del llamado, para que la formanda vaya adquiriendo madurez vocacional. Por medio de la interiorización e integración del proceso formativo acompañado de experiencias apostólicas y profunda experiencia espiritual.
Tiene duración de un año como mínimo y dos como máximo.
postulantado
El noviciado, con el que comienza la vida de nuestro instituto, tiene como finalidad que las novicias conozcan mejor la vocación divina, particularmente la propia del Instituto. El objetivo principal del noviciado es adquirir una nueva identidad: discípula y apóstol, al seguimiento de Cristo según el carisma y espiritualidad de MARILAM, preparándose así a un compromiso libre y responsable en el Instituto.
El noviciado no debe durar más de dos años.
Noviciado
El Juniorado es una etapa de profundización y unificación de la vida consagrada al servicio de la misión. Durante esta etapa la Juniora afirmará su identidad de consagrada en nuestro Instituto. Con la primera profesión comienza el juniorado, que comprende un período mínimo de tres años y máximo de seis.
Juniorado
La profesión perpetua obliga a la Hermana a sentirse necesitada de conversión e ir tomando las actitudes de Cristo, pues la meta es la configuración con su estilo de vida, pobre, casto, obediente y misionero.
Votos Perpetuos